Recientemente compartí un artículo mío donde hablo de los fallos que más comúnmente cometemos los empresarios.

Una persona me contestó que tiene adquiridas todas las habilidades como empresario y que “su único problema es que le faltan recursos humanos competentes, como el 80% de los empresarios, que no encontramos mano de obra comprometida, cualificada, trabajadora, entregada, leal, respetable…”

La falta de mano de obra en las empresas, y sobre todo en determinados sectores, es un problema que se viene escuchando desde hace ya algún tiempo, y que lejos de mejorar, empeora cada día, y se extiende a otros sectores.

Esta falta de mano de obra es completamente contradictoria con los casi tres millones de parados que hay en España.

Y entonces, ¿qué está pasando?

¿Qué quiere decir un empresario cuando dice que no encuentra mano de obra comprometida, cualificada, trabajadora, entregada, leal y respetable?

¿Qué condiciones ofrecen para conseguir esa mano de obra?

¿Qué busca el trabajador para no acudir a una oferta de trabajo?

¿Por qué elige no trabajar y mantenerse en situación de incertidumbre antes que tener un puesto de trabajo que le permita cierta estabilidad económica?

Son preguntas que nos afectan a todos, y que el sólo hecho de que tengan que plantearse dejan patente la urgente necesidad de un cambio radical en nuestras empresas, un cambio por parte de todos, un cambio en la visión que los empresarios tienen de los trabajadores y en la visión que los trabajadores tienen de los empresarios.

Necesitamos urgentemente tener empresas donde prime la comunicación y la confianza, el trabajo en equipo, empresas donde haya un PROPÓSITO (que ayer mencionaba mi compañero Joseba Perez en un post), y que todos los que la formen, vayan en una misma dirección, enfocados en ese PROPÓSITO.

¿Quieres iniciar un cambio en tu empresa?